Yoga Yoga y hábitos saludables
por Gema Soria Bodoque
Tutora Nivel II en la Escuela Internacional de Yoga.
Profesora de Yoga.

Según la OMS la salud se define como “un estado de completo bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”

El goce del grado máximo de salud que se pueda lograr es uno de los derechos fundamentales de todo ser humano sin distinción de raza, religión, ideología política o condición económica o social.

La OMS también habla de los 7 hábitos saludables necesarios para cuidar el cuerpo:

1.- Elegir alimentos saludables

2.- Hacer actividad física con regularidad

3.- Evitar o dejar de fumar

4.- Evitar o reducir el consumo de bebidas alcohólicas

5.- Control del peso

6.- Sueño regular y de calidad

7.- Cuidar la salud mental

Por último, si hablamos de hábito se contempla que es una forma especial de proceder, adquirido por repetición de actos u originado por tendencias instintivas.

Si contemplamos todas estas definiciones, podríamos directamente establecer una relación con el yoga y decir que podríamos considerarlo un hábito saludable, ya que a través de su práctica conseguimos mejorar nuestra calidad de vida, adquirir rutinas saludables que nos ayudan a establecer una mejor salud física, mental y social.

Pero además el yoga, crea comunidad, el hecho de acudir a practicar a una escuela, nos ayuda a relacionarnos con los demás, en un ambiente en el que predomina la autoescucha, la contemplación, la compasión y el amor en su concepto más amplio. Nos ayuda a habitar nuestro ser, a vivir y morar de forma consciente, bajo una filosofía de cuidado y respeto hacia uno mismo y hacia el resto de los seres.

Ahimsa (la no violencia), es uno de los pilares básicos del camino espiritual y filosófico del yoga. Nos habla del respeto por la vida, comenzando por uno mismo, como nos hablamos, si nos aceptamos tal y como somos, con nuestras limitaciones y nuestras grandezas personales, si de forma inconsciente nos dañamos, no sólo a través de la práctica, sino también a través de las comidas y de nuestro diálogo interno, que tanto nos daña a menudo.

Pero además uno de los grandes textos en el yoga, el HATHA YOGA PRADIPIKA, nos habla ya por el siglo XIV de hábitos saludables basados en prácticas habituales dentro del yoga.

Nos habla de como del sadhaka (practicante) tras madrugar y levantarse al amanecer, realizara su higiene personal, nos habla incluso de cómo el lugar en el que realice su práctica debe estar limpio, ordenado y preparado para el momento y el propósito. Se comenta que, tras su sesión de asanas, pranayamas purificatorios, mudras y meditación, el sadhaka debe elegir alimentos digestivos y descansar.

Hay muchas referencias al estilo de vida de un yogui, libre de preocupaciones o perturbaciones, referencia la alimentación, nos habla de la moderación de la dieta, pero también de la moderación en el ejercicio físico sin llegar al agotamiento.

Tanto en el Yoga como en el Ayurveda (la ciencia de la vida), que son dos disciplinas que van de la mano, se nos habla de las 3 gunas sattva (pureza, armonía), rajas (actividad, pasión) y tamas (oscuridad, inercia), que no son más que las cualidades principales de la naturaleza que unen el alma y el cuerpo, son las energías del Universo, un microcosmos (así se ve nuestro cuerpo) en un macrocosmos. Estas cualidades o estas energías, que son necesarias y están presentes en nuestra vida, deben estar en equilibrio, ya que su desequilibrio es lo que nos genera enfermedades.

Ambas disciplinas nos ayudan a vivir en un estado más sátvico a través de una dieta basada en alimentos que nos den fuerza vital , una dieta pránica contemplando una dieta basada en frutas, verduras, cereales integrales, frutos secos y semillas, aceites vegetales, productos lácteos de buena calidad (ghee), azúcares sin refinar, especias que ayuden a mantener vivo nuestro agni o fuego digestivo, alimentos de temporada, cocinados con amor y con consciencia que nos aporten energía vital y nos ayuden a mantener nuestra salud física, mental, y nuestros humores corporales vata, pitta y Kapha en equilibrio, en homeostasis.

También comparten técnicas de purificación o Kriyas, entre las que se incluyen Dhauti (limpieza de dientes, oídos, lengua y senos frontales, limpieza de esófago y del intestino grueso), Basti limpieza del recto con agua), Neti (limpieza de fosas nasales), Trataka (limpieza de los ojos fijando la mirada sin parpadear), Nauli y Kaphalabhati (limpieza de senos nasales y pulmones).

La idea es prevenir o evitar enfermedades a través del autocuidado personal, contemplando todos los planos, haciendo participe del proceso en todos sus aspectos a la persona, permitiendo que la persona sea más consciente y esté más presente en su propio cuerpo, en sus propios actos, en sus propias decisiones, no sólo en el plano físico, sino también el mental y el social., entendiendo al ser de forma holística en todos los cuerpos o kosas, para encontrar esa salud y esa vida plena y saludable.

B.K.S. Iyengar en su libro “Yoga-el Camino a la Salud Holística” nos habla de cómo la práctica trabaja en muchos niveles:

Annamayakosha (el cuerpo anatómico, estructural) hecha de alimento, compuesta por comida. Llevar una alimentación más consciente, contemplar tu cuerpo como un espacio sagrado, un tempo para habitar.

Pranamayakosha (envoltura del prana o vida). Rodearte de personas y situaciones nutritivas, cuidar tu energía, y enfocar tus pensamientos. Cuando eres consciente de este velo de fuerza vital, utilizas a tu favor dicha fuerza divina para experimentar vigor, salud y longevidad.

Manomayakosha (envoltura de la mente). Abarca tanto lo que pensamos como lo que sentimos. También es esa parte de nosotros que es responsable de nuestras funciones cognitivas, como la percepción, la memoría y el razonamiento. Cultivar la higiene mental.

Vijnamayakosha (envolutura del conocimiento o sabiduría). Sabiduría es utilizar tus herramientas mentales, perceptuales y de memoria para discernir, tomar buenas decisiones, conectar con tu intuición y tener una vida más plena.

Anandamayakosha (envoltura de la dicha). Es la capa del gozo espiritual, la más cercana a nuestra esencia. La plenitud, la unión y la fusión con los demás y con el todo, pura alegría deleite y felicidad.

Según el HATHA YOGA PRADIPIKA 78. dice que los efectos de la práctica:

“Agilidad física, brillo en el rostro, manifestación del sonido interior. Control de la energía sexual, aumento del fuego digestivo y purificación total de los Nadi”

Hacia una salud plena, recorriendo el camino con amor, con intención, acción y sensibilidad.

Vivir una vida más consciente, más presente, más plena. En el camino del yoga, en el camino de la vida.

Bibliografia:

HYP.

Yoga y Ayurveda. Autosanación y autorrealización. Dr. David Frawley.

“Yoga-el Camino a la salud Holística” B.K.S. Iyengar